Me encanta dormir en invierno porque hace frío y me puedo acurrucar en mi cama.
Me gusta porque no hay zancudos que me despierten en las noches.
Cuando la nariz se pone fría uno puede taparse hasta la cabeza y no se asfixia como en verano.
Siempre he sido dormilona. Me acuesto tarde y es un suplicio levantarme temprano!
Felizmente estoy de vacaciones y puedo dormir un poco más estos días, además me cae perfecto después de que la semana pasada fue un poco difícil.
Cuando duermo muy abrigada saco un pie de las colchas. Me sirve como termostato para no morirme de calor. Igual hace mi mamá.
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4 comentarios:
Dormir es uno de los placeres más grande, pero al parecer estoy destinado a huirle. Apenas cierro los ojos, mil ideas vuelan en mi cabeza y me dejan insomne hasta las 3 de la mañana, pensando en todo lo q puedo hacer en ese tiempo. Son los tiempos del stress.
Habla Majo, porq deciden ir a Yacana justo el día que no puedo. La veo en misanto, ahora pronto, a la vuelta de la esquina.
He aprendido un par de ejercicios de relajación para dormir fantasmita,a ver si los paso.
Ya viene el cumplete! Ya toca vernos!
Beso
las mostras tb somos unas dormilonas compulsivas... y una de ella tb saca el pie como tu y tu mamá jejejeje...
Es que dormir es una delicia!!!
Y ya me imagino a q mostra se refieren jeje!!!
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